A mediados de julio, la actriz ingresó en una clínica porteña por un cuadro de bronquitis severa; sin embargo, con el correr de los días, su estado se fue agravando llegando a sufrir problemas de visión y movilidad; ya recuperada, analiza iniciar acciones legales contra la primera institución por mala praxis
A mediados de julio, Romina Gaetani entró en una guardia hospitalaria por problemas respiratorios sin saber que quedaría internada por varias semanas. La actriz, que será parte de Buenos chicos (la nueva tira de Polka), tuvo que suspender las grabaciones debido a su delicado estado de salud. Si bien en un primer momento se hablaba de un cuadro de bronquitis severa, con el correr de los días su estado fue empeorando, sufriendo problemas en su visión y movilidad.
Ya recuperada y retomando el rodaje de la novela que próximamente ocupará el prime time de eltrece, Gaetani habló de su estado de salud actual y contó si iniciará acciones legales contra la primera clínica porteña donde, al parecer, fue víctima de mala praxis. “Estoy bien, todavía recuperándome. Decían que tenía bronquitis severa, pero cuando pregunte qué grave estaba me dijeron: ‘un nueve largo’. Así que fue neumonía”, confesó la intérprete en una nota con Socios del espectáculo.
“¿Sentís que hubo mala praxis en la primera internación?”, le preguntó el cronista del ciclo sin vueltas. “Mala praxis no sabría decir, eso queda en manos de Ignacio Trimarco (su abogado). Todavía no me senté a hablar, es como que voy paso a paso. Tuve una primera internación donde no me sentí cómoda, no me sentí cuidada y después me dieron el alta, me fui a casa y como no me sentía bien volví de nuevo”, contó la también cantante quién luego debió ser internada en una segunda institución.
“Yo soy asmática desde chica por eso se me complicó el cuadro y me dieron una medicación (que no voy a decir qué porque creo que no es conveniente), en donde no me informaron lo que me iba a pasar. Yo fui comunicando que me iba sintiendo mal a medida que me la iban dando. No sé ahí si la enfermera comunicó o no comunicó, pero en un momento me agarró una crisis fea, discutí con la doctora y ahí el cuadro se complicó porque entre los nervios más la cantidad de corticoides que estaba recibiendo empeoró todo”, relató.
Entre su diagnóstico previo más la discusión con los profesionales que la atendieron, su cuadro empeoró cada vez más. “Se me nubló muchísimo la vista y era tal el nivel de angustia y bronca que sentía que llamé a mi hermano un sábado 1.30 de la mañana como pude. Luego, le escribí a Ignacio y le pedí que se comunique con mi hermano y ahí entre ellos se fueron comunicando”, recordó quien por ese entonces ya había recibido el alta y se encontraba sola en su casa. “No sé qué pasó acá, pero todavía me pasa que cuando lo digo, me sigo poniendo nerviosa, me tiembla el cuerpo. No logro bajar de toda esa situación y de lo que pasó”, remató angustiada.
Su internación paso a paso
El 15 de julio, Romina Gaetani recurrió a sus redes para contar una situación de salud que estaba atravesando. En silla de ruedas y con una sonda en su muñeca, la actriz contó que la iban a dejar internada debido a que no estaba saturando bien. No obstante, hizo de este mal trago, un divertido momento con el camillero que conoció en los pasillos de la clínica y que la trasladó hacia su habitación; esa en la que sin saberlo iba a pasar varias noches.
“¿En serio me acabás de decir que soy el amor de toda tu vida en este pasillo? ¿Con un suero?”, le preguntó Gaetani al camillero que la llevaba mientras redoblaba la apuesta: “Bueno, dejame decirte qué guapo que sos entonces”, lanzó, entre risas, y tratando de tomarse con humor el mal momento. “¡Me tengo que internar para encontrar novio! Es así, en la vida uno nunca sabe. ¡Ay, Dios mío! Hiperventilada con novio”, indicó Gaetani antes de cerrar el diálogo con sus seguidores y dar señales de que se encontraba de buen humor a pesar de su internación. “¡Me tengo que internar para encontrar novio! Es así, en la vida uno nunca sabe. ¡Ay Dios mío! Hiperventilada con novio”, remató entrando a su habitación.
Sin embargo, con el correr de las horas, las bromas, los piropos y las historias de Instagram fueron reemplazados por angustia, incertidumbre y enojo. “No tan buen día… sigo aquí”, escribió días después junto a una imagen en donde se veía su computadora personal, un par de auriculares y un peluche de Bob Esponja sobre el sillón de la clínica porteña.
Luego de casi seis días, la actriz y cantante recibió el alta médica sin embargo, a las pocas horas tuvo que volver a ser internada aunque esta vez en otro sanatorio de la ciudad. “Muchas gracias a todo el equipo de profesionales del Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento por contenerme, sanarme, estar atentos, mirarme a los ojos cuando dicen mi nombre, tomarme de la mano y progresar en el tratamiento”, escribió en una nueva historia de Instagram dando cuenta de lo diferente que estaba siendo la atención con respecto a la primera clínica.
“Qué tranquila me deja poder decir: hoy estoy mucho mejor. Después de 6 días de internación, más el traslado hacia aquí, esta nave me abdujo y en 3 días pude volver a respirar. Gracias a todos por sus oraciones y buenas vibras… Llegaron todas”, expresó.