El gobernador de Río Negro criticó al Gobierno por intentar “modificar 15 o 20 años de matriz energética” en un bimestre.
El Gobierno nacional dispuso ayer que el aumento de tarifas residenciales de gas para las provincias de Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut, Río Negro, Neuquén y La Pampa tenga un límite de 400 por ciento. Sin embargo, los gobernadores provinciales no se mostraron conformes con la cifra.
La decisión, comunicada este lunes por los ministros del Interior, Rogelio Frigerio, y de Energía, Juan José Aranguren, “no sirve” según la opinión del gobernador rionegrino Alberto Weretilneck.
En diálogo con radio Vorterix, el mandatario expresó ante la pregunta de si están conformes con lo ofrecido por el Gobierno nacional: “Estoy conforme por la posibilidad de hablar, conforme por la posibilidad de escucharnos, pero obviamente que la respuesta del Gobierno no nos sirve, porque no se puede pagar un aumento del gas en la Patagonia con un aumento del 400%. Y no puede pagar un comercio o una industria un aumento del 1200 por ciento“.
“Es una cuestión de sentido común. No ha habido en la historia económica que alguien aumente 400% algo. No habrá pasado en una situación normal de democracia”.
En cuanto a la justificación del Ejecutivo por el “sinceramiento” de la economía, dijo: “Entendemos el porqué del Gobierno. Entendemos que hay que solventar los gastos de importación de gas de Bolivia y Chile. El precio que significa traer los barcos a los puertos. El aspecto que tiene que ver con dar más dinero a las operadores para que las operadores inviertan más en gas. Entiendo todo. Pero lo que se está discutiendo es la forma, el modo”.
“Lo que se hizo ayer, es actualizar de una sola vez las tarifas de la Patagonia. Primero, hay que tener en cuenta que en la Patagonia el gas se usa para todo, para calefacción, para las panaderías, para todo. Con lo cual es uno de los insumos más importantes. En Tierra del Fuego además no pasa de los 8 grados en todo el año. Una familia que tiene gas y que no lo puede usar, pasa a condiciones gravísimas. Lo que importa mucho es el impacto en la situación económica. Pasa a impactar a hoteles, restaurantes. ¿A donde se traslada el aumento? Si se traslada a los costos, los turistas no vendrían a la Patagonia”.
Weretilneck manifestó que realizaron una contraoferta pero fue rechazada: “Planteamos al Gobierno que se tendría que hacer de otra manera, que estudiemos alguna forma de hacer esto. Otra forma de impactar, de que se cobren las mismas cosas de acá hasta septiembre, y que entonces se empiece con el nuevo cuadro tarifario nuevo una vez que se pase el invierno. Nos dijeron que no podían por distintos motivos legales… Uno lo entiende. Tratamos de colaborar desde el aspecto positivo. De todos modos, les quedó que se iba a analizar nuevamente y veremos qué pasa”.
“Pero no es suficiente porque hay otro aspecto. En residencial es el aumento del 400%, pero en los comercios es otro, es de 1200% o más. Una parte de ese aumento se factura ahora, la otra mitad se tiene que pagar en el semestre de enero-junio del año que viene. No se modificó la tarifa, sino que las pymes tendrían que ir pagándolo hacia adelante”.