En el Frente de Todos hay 9 escaños ocupados por gremialistas. 5 concluyen su mandato este año. Quiénes buscan seguir. Padrinos y posibilidades.
Entre las 119 voluntades que integran el Frente de Todos en la Cámara baja, existe una tribu continuadora de una histórica tradición parlamentaria del peronismo: los diputados y las diputadas de origen sindical. En la actualidad son nueve. Cuatro asumieron en diciembre de 2019 y concluyen en 2023, pero cinco terminan este año y, en su mayoría, buscarán pelear por un nuevo mandato dentro de las listas del oficialismo.
Son los casos de la bonaerense Vanesa Siley, dirigente de La Cámpora y del Sindicato de Trabajadores Judiciales (SiTraJu); el docente y dirigente de la CTA Hugo Yasky, el comunicólogo y exsecretario general de los universitarios cordobeses Pablo Carro y el secretario general del Sindicato de Obreros Curtidores, Walter Correa. Los cuatro llegaron al recinto en las listas de Unidad Ciudadana y, según confió una alta fuente sindical a Letra P, acordaron pelear por un nuevo round en las elecciones de este año con la apuesta de aumentar la presencia gremial dentro del espacio que conduce Máximo Kirchner.
La quinta banca sindical que vence este año está ocupada por la santafesina Patricia Mounier, dirigente del gremio de docentes privados (SADOP) y la primera del sindicato que llega al Congreso. Asumió en 2019 en reemplazo de su coterránea Alejandra Rodenas, que dejó el cargo en diciembre de ese año para jurar como vicegobernadora de Santa Fe en dupla con Omar Perotti.
Sobre Mounier no hay certezas respecto a su continuidad. Si bien le toca transitar un mandato corto, la diputada integra la Corriente Nacional de la Militancia, el espacio que lidera el ministro de Defensa, Agustín Rossi. En Santa Fe sostienen que no tiene muchas chances de ir por la reelección y deslizan que hay otros aspirantes de mayor peso para pelear por una banca. Uno de ellos es el titular del bloque de diputados en la Legislatura santafesina, Leandro Bussato. En la disputa de los lugares en las listas del FdT provincial, el kirchnerismo buscaría la reelección de la senadora María de los Ángeles Sacnun, Perotti la del senador Eduardo Mirabella y Rossi reclamaría un lugar para Bussato.
Si se confirmase ese escenario, la dirigente de SADOP sería la única diputada sindical que este año no buscaría un nuevo mandato. Este portal buscó conocer su punto de vista, pero Mounier no contestó.
El espacio de escaños sindicales del Frente de Todos se completa con quienes terminan en 2023 y transitan su segundo año de mandato: Facundo Moyano, que lideró el gremio de los trabajadores y las trabajadoras de peajes desde 2009 y actualmente transita su segundo mandato en el recinto. También está el exvicegobernador puntano Carlos Ybrhain Ponce, dirigente de la Unión Obreros y Empleados Plásticos y de la CGT Regional Villa Mercedes, provincia de San Luis.
A ellos se suman un legislador y una legisladora de la Asociación Bancaria: el tucumano Carlos Cisneros, secretario general de seccional de su provincia, y Claudia Ormachea, secretaria de Género a nivel nacional de la organización que encabeza el mendocino Sergio Palazzo.
El jefe del gremio bancario también es el principal dirigente de la Corriente Federal de Trabajadores, uno de los agrupamientos de la CGT y el más cercano al kirchnerismo. En la actualidad, es el espacio que más diputados tiene dentro del oficialismo: además de La Bancaria, también integra a SADOP, al que pertenece Mounier; al sindicato de Curtidores, que lidera Correa, y al SiTraJu, que conduce Siley. La joven dirigente preside la Comisión de Legislación del Trabajo y fue una pieza clave en el acercamiento, durante 2018, de CFK con el líder del gremio de Camioneros, Hugo Moyano.
La influencia de la CFT también incluye a la diputada María Rosa Martínez, aunque es una dirigente política que responde a Kolina, la agrupación del FdT que fue fundada por la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner.
Por Claudio Mardones – Letra P