A la víctima, de 26 años, le atravesaron la espalda a puntazos. El sangriento suceso ocurrió en la localidad bonarense de El Talar, partido de Tigre. Por el hecho fue detenido un narcotraficante apodado Toto.
Pesquisas policiales de la Delegación Departamental de Investigaciones de Tigre y de la comisaría 6ª del citado distrito lograron detener a un peligroso narcotraficante, apodado “Toto“, quien aparece sindicado como el responsable material del asesinato de un joven de 26 años, a quien la hiena mató salvajemente a cuchilladas en la espalda, porque la víctima le reclamó por la pésima calidad de la cocaína que le había vendido a uno de sus amigos. Este cruento suceso se registró en la localidad bonaerense de El Talar.
Los voceros de los tribunales de San Isidro revelaron que el brutal delincuente, llamado Eduardo Matías, de 29 años y conocido con el citado apodo, resultó apresado por los servidores públicos, al ser interceptado en el cruce de Las Daolias y Paraguay, en el denominado Barrio La Paloma.
Trascendió que el despiadado marginal era buscado a raíz del tremendo asesinato de un muchacho de 26 años, quien lo increpó violentamente por haberle comercializado esta sustancia ilegal, de mala calidad, a uno de sus amigos, porque la misma estaba adulterada (“cortada“, en la jerga de las instituciones de seguridad).
Acalorada reyerta
Por este motivo, se originó una acalorada reyerta en la avenida Antares, entre Domingo French e Ignacio Pirovano, en el norte del conurbano provincial, en la que el narcotraficante, mediante la utilización de un arma blanca, le aplicó diferentes cuchilladas en la espalda a su adversario, llamado Gustavo Alejandro. La víctima dejó de existir tras haber sido trasladada a una sala de primeros auxilios ubicada en el Barrio Ricardo Rojas.
Las diligencias investigativas, que finalizaron con la captura del sanguinario hampón, estuvieron supervisadas por la doctora Claudia Liliana Gambotto, quien es fiscal en turno de la Unidad Funcional de El Talar Centro, dependiente del departamento judicial de San Isidro. De esta forma, los funcionarios establecieron las verdaderas razones del altercado entre el joven y el victimario.