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Salvaje emboscada: dos motochorros le apuntaron a un hombre y a su hija de ocho años para robarles la moto

La víctima estaba por entrar a su casa cuando los delincuentes lo interceptaron y escaparon en menos de un minuto. La nena quedó en shock y no quiere salir de su casa.

Un hombre y su hija de ocho años sufrieron una salvaje emboscada en la localidad bonaerense de Castelar, cuando dos motochorros los interceptaron antes de entrar a su casa y les apuntaron con un arma para robarles la moto.

El dramático episodio ocurrió minutos después de las 20 de este miércoles, cuando Federico y su hija estaban por ingresar a su casa ubicada en la intersección de las calles Sarmiento y Zapiola.

La cámara de seguridad grabó el momento en el que las víctimas subieron con su moto hasta la puerta del portón de su casa y ahí se vieron interceptados por los dos delincuentes que iban a bordo de una misma moto.

El hombre trató de bajar la moto al piso para que su hija no se cayera, pero fue tal la violencia con la que llegaron los ladrones que la menor quedó debajo del vehículo. En ese instante, el delincuente que iba como acompañante lo arrinconó.

Fueron apenas unos segundos donde le revisaron los bolsillos para ver si podían llevarse algo más, pero al ver que la víctima no tenía nada, ambos escaparon a toda velocidad en las dos motos.

Federico, el hombre que sufrió el robo, contó que estaba llegando con su hija de un club cuando los agresores los interceptaron. “Subo la vereda y en segundos veo un arma que me está apuntando en la cabeza y me dicen ´dame la moto´”, relató.

“Intento bajar la moto hacia la derecha porque estaba mi hija atrás, para que no se caiga. Cuando bajo la moto se me viene encima el segundo delincuente. Levanto los brazos, le digo ´no tengo nada´, ´no tengo nada´, me empieza a palpar, agarra las cosas y se van”, contó.

La víctima detalló que realizó la denuncia ni bien sufrió el robo, unos instantes después de intentar calmar a su hija. Pese a ello, la policía no pudo dar con la XR 150 que le robaron durante la noche del miércoles. “Un delivery me dijo que el que me robó tenía mi misma moto”, contó.

Federico también contó cómo quedó su hija luego del impactante episodio: “Estaba muy nerviosa. Ayer a la noche no paraba de decir que no quería salir más a la calle ni ir al colegio. Tiene ocho años y vio el arma. Yo bajé la moto despacio para que ella no se caiga, pero quedó abajo de la moto igual”.

“No queda otra. Hoy estás regalado, tenés que dar gracia de que no te mataron y que no le hicieron nada a mi hija que es lo más importante”, completó.