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Lionel Scaloni: “El camino es largo todavía”

El entrenador disfruta el presente, pero prefiere bajar un mensaje que mantenga al grupo preparado ante la adversidad. Mirá el video.

Con el tercer gol, el de Paulo Dybala en tiempo adicionado y a pocos minutos de haber ingresado desde el banco, el DT Lionel Scaloni se relajó y se permitió un festejo al borde de la cancha, con una larga sonrisa. La goleada de la selección argentina por 3-0 sobre Italia en “La Finalissima” estaba sellada y el entrenador liberó tensiones. Luego, ante los micrófonos, apeló a un análisis bastante alejado del exitismo: “Lo que vale es el espíritu de sacrificio, de lucha y de equipo que muestra el grupo, más allá de los resultados. Lo que queremos es un funcionamiento, saber lo que busca el equipo en la cancha”.

Scaloni apuesta a la cautela, a mantener los pies sobre la tierra pese al nivel muy elevado del equipo. “Hay, tal vez, demasiada ilusión (en la gente), porque en el fútbol cuando te creés que está todo hecho, te bajan de un plumazo. Sí sabemos que vamos a ir a un Mundial a competir de igual a igual con cualquier equipo”, señaló en ESPN, y parece enfocado sobre todo en ese aspecto, ponerle el interrogante a la invencibilidad. “Creemos que la confianza de ganar te libera de muchas cosas, pero no estamos exentos de que el equipo se pueda bloquear en algún momento y eso es lo que me preocupa. Tenemos que estar preparados por si el destino se tuerce”, explicó, poniendo énfasis en un tema que ya había abordado en la conferencia de prensa previa al juego.

Con el tercer gol, el de Paulo Dybala en tiempo adicionado y a pocos minutos de haber ingresado desde el banco, el DT Lionel Scaloni se relajó y se permitió un festejo al borde de la cancha, con una larga sonrisa. La goleada de la selección argentina por 3-0 sobre Italia en “La Finalissima” estaba sellada y el entrenador liberó tensiones. Luego, ante los micrófonos, apeló a un análisis bastante alejado del exitismo: “Lo que vale es el espíritu de sacrificio, de lucha y de equipo que muestra el grupo, más allá de los resultados. Lo que queremos es un funcionamiento, saber lo que busca el equipo en la cancha”.

Scaloni apuesta a la cautela, a mantener los pies sobre la tierra pese al nivel muy elevado del equipo. “Hay, tal vez, demasiada ilusión (en la gente), porque en el fútbol cuando te creés que está todo hecho, te bajan de un plumazo. Sí sabemos que vamos a ir a un Mundial a competir de igual a igual con cualquier equipo”, señaló en ESPN, y parece enfocado sobre todo en ese aspecto, ponerle el interrogante a la invencibilidad. “Creemos que la confianza de ganar te libera de muchas cosas, pero no estamos exentos de que el equipo se pueda bloquear en algún momento y eso es lo que me preocupa. Tenemos que estar preparados por si el destino se tuerce”, explicó, poniendo énfasis en un tema que ya había abordado en la conferencia de prensa previa al juego.

Lionel Scaloni vivió el partido con intensidad, al límite del campo de juego
Lionel Scaloni vivió el partido con intensidad, al límite del campo de juegoMatt Dunham – AP

Con la copa en lo alto en manos de Messi, Scaloni observó desde cerca a sus dirigidos en pleno festejo con los ojos llenos de emoción y de satisfacción. Era el nuevo título y la serie de 32 partidos seguidos sin derrotas que lleva en el cargo. “Se puede perder, ya sea en un Mundial o en la clasificación, como le pasó a Italia justo en el último partido después de ser campeón de Europa y ganarles a todos. Y si pasa en el Mundial, ¿qué hacemos, tiramos todo por la borda? No se tiene que tirar todo lo que hiciste antes, pero hay que entender que puede pasar en algún momento y por eso mi mensaje”, sostuvo.

Tras el partido, el entrenador se acercó a los jugadores argentinos que saltaban y cantaban en el medio de la cancha y se abrazó con cada uno de ellos. “No van a bajar la guardia, saben que alguno se va a quedar afuera, pero ninguno está dispuesto a bajar la guardia. Va a ser un momento duro, que yo ya lo viví cuando me tocó como futbolista, que algunos compañeros y amigos quedaran afuera de la lista de José (Pekerman) en Alemania 2006, pero habrá que manejarlo de la mejor manera posible. Ojalá todo pudieran ver lo que son los entrenamientos de estos chicos”, destacó. “Vamos a llevar a menos ocho defensores, pero no tengo un número definido para cada sector. Va a depender del momento de los jugadores y de que sepan aprovechar estos meses que quedan hasta el Mundial”, advirtió.

“No pienso en los números ni en las comparaciones que se hacen en los títulos ganados, porque sería una falta de respeto con muchos entrenadores que pasaron por esta selección”, dijo. Prefiere seguir con el eje en el trabajo, hoy: “No sé si es el mejor partido que jugamos. En el primer tiempo creo que nos pusieron en aprietos, por momentos. Nos sentimos cómodos después. Quiero que cada vez que nos juntemos estemos de la misma manera, unidos como ahora. El Mundial va a ser otra cosa, tiene una presión distinta. Ahora la gente disfruta y es lo más importante para nosotros”.

A falta de dos minutos para terminar el partido, con la Argentina ganando por 2-0, desde las tribunas comenzó a bajar el grito de “Dale campeón”. El DT hizo señas de que no sigan. “No correspondía. Todavía faltaba y ya hay muchos ejemplos de que hasta el final no se puede festejar”, indicó. Tiene a su lado un cuerpo técnico con el que vivió una etapa exitosa cuando jugaban en las selecciones juveniles. “Seguimos pensando igual que lo hacíamos de chicos con este grupo que me acompaña”, aseguró.

“Cualquier entrenador va mejorando con el tiempo y también es mi caso. El que cree que se las sabe todas está equivocado. Cuando llegamos creíamos que teníamos que acomodar las cosas y juntar a los que jugaban bien, al menos a los de muy buen pie. Arrancamos con una idea diferente a lo que somos ahora, porque vimos en el proceso que los grandes futbolistas que tenemos querían jugar a otra cosa. Y entonces, les dimos la oportunidad de que disfruten adentro de la cancha”, enfatizó. Asumió tras la frustrante eliminación en octavos de final en Rusia 2018.

Además, el preparador se acordó de su familia, especialmente de los padres, afectados por problemas de salud. “Ojalá mis viejos lo estén viendo como puedan. Soy lo que soy gracias a ellos”, se emocionó.