Chubut Para Todos

La trágica historia del ciudadano ruso que fue asesinado por motochorros 

Eugenio Sipatov llegó a la Argentina hace más de 20 años junto a toda su familia. Pasó por muchos barrios hasta que decidió construir su propia casa en Lanús a la espera de su primer hijo. Cuatro motochorros lo asesinaron para robarle.

“Iba a ser padre el 18 de enero”. Con esa frase resumió Dimitri, el cuñado de Eugenio Sipatov, la etapa de la vida que estaba a punto de comenzar para el ciudadano ruso que fue asesinado por cuatro motochorros en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Remedios de Escalada.

Eugenio había llegado a la Argentina hace más de 20 años junto a toda su familia. Con ellos pasó por muchos barrios de la zona sur del conurbano bonaerense: desde Berazategui hasta Lanús. Finalmente se decidió por construir su propia casa en Escalada.

La casa que había construido -y que todavía estaba en construcción- era para que vivieran él, su esposa y el hijo que estaba a punto de nacer. Faltaban solo diez días para que la espera se terminara, la pareja se convirtiera en una familia y naciera su bebé.

Sin embargo, cuatro motochorros se toparon con Eugenio en la puerta de su nuevo hogar cuando el ciudadano ruso estaba tomando mates con un amigo. La secuencia duró apenas unos segundos y uno de los delincuentes le disparó en el pecho para robarle. En cuestión de minutos lo mataron.

“Sospechamos que tal vez querían entrar en la casa y él se resistió porque adentro estaba mi hermana embarazada”, contó Dimitri. Al mismo tiempo, reveló que al hombre de 40 años le habían robado el auto hace algunos años en la misma zona.

El cuñado de la víctima reveló que su hermana estaba adentro de la casa y contó cómo está de salud a diez días de ser madre: “Está estresada y atravesando el duelo. Tratamos de hacer lo posible para que el bebé pueda estar lo mejor posible”.

Video Placeholder

El video del momento en el que cuatro motochorros asesinaron al ciudadano ruso en Remedios de Escalada. (Foto: captura de video).

Muchos vecinos trataron de asistir a Eugenio. Tres de ellos se turnaron para hacerle RCP mientras transitaban la eterna espera de la ambulancia que, cuando llegó, ya no tuvo margen de acción y no hubo más opción que confirmar la muerte del ciudadano ruso.

Lo cierto es que en el barrio era bastante querido, pese a que hace mucho que no vivía ahí. “Es una lástima porque él trabajó mucho, se estaba armando la casa, esperaba familia, iba a ser padre la próxima semana. Es algo que a todo el barrio nos tiene mal”, señaló uno de los vecinos que lo asistió.

Su padre, también ruso, habló cerca del mediodía y mostró todo su enojo por la injusticia que vive la familia: “Perdí a mi hijo. No lo perdí en la guerra, lo perdí acá. Y acá no hay guerra, ¿o no?”

“La esposa está muy mal. Le queda una semana más de embarazo”, detalló el padre de la víctima, quien también confirmó que todavía no hay avances en la investigación por el crimen de su hijo.

Fuente: TN