El Frente UNA, que se presento en las pasadas elecciones y postulo a Sergio Massa, por una lado y a José Manuel de la Sota por el otro, en una interna que finalmente deposito al Tigrense en las elecciones generales de octubre, por estas horas viene sufriendo una serie de “diferencias” internas con los Partidos nacionales que la componen el MID, Demócrata Cristiano, Unión Popular, UNIR y Unión Celeste y Blanco. este último, partido formado por Francisco De Narváez, ya retirado de la política, se había acercado a Scioli acordando que el ex diputado nacional denarvaista Gustavo Ferrari se haría cargo de la AFI, ex SIDE, si este llegaba a la presidencia, Ferrari había sido convocado por Scioli para formar parte de la asesoría general de gobierno de la provincia.
Con la novela de Mónica López, que sorpresivamente planto a Massa a días de las elecciones, para pasarse a las filas Sciolistas, cual novio se arrepiente en el altar, significo finalmente la expulsión del bloque del Frente Renovador de Alberto Roberti, diputado y Secretario General del gremio de Petroleros, que también es dueño del partido Unión Popular, partido que lógicamente ha dejado de formar parte del frente UNA.
Y como si la sangría de dirigentes, diputados y partidos fuera poco, este semana salió a la luz un comunicado de prensa del partido UNIR, cuyo presidente es el Diputado del Mercosur Alberto Asseff, firmado por su Secretario General Daniel Vico, quienes advierten, palabras más, palabras menos, que si no son tenidos en cuenta por el Frente de Massa buscaran otros espacios donde sí los tengan en cuenta, según pudimos averiguar, los tiempos se precipitaron desde la noticia que Sergio Massa había acordado con la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal para que un hombre del FR, Jorge Sarghini sea el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Eduardo Cergnul sea secretario legislativo, Gerardo Otero secretario administrativo, además de decenas de puestos en Secretarias y Direcciones de la cartera provincial.
En el documento, Vico expresa que Unir se mantuvo siempre fiel al frente que integraban, mas allá de la diáspora que sufría día a día con la fuga de dirigentes a otros espacios, según parece no fueron tenidos en cuenta a la hora de los acuerdos con Vidal en provincia.
Lo cierto es que el año que viene se rearmaran las alianzas y Sergio Massa buscara la Senaduría Nacional por Buenos Aires, que lo fortalecería en una eventual candidatura presidencial en 2019, para eso necesitara armarse fuertemente, ya que tendrá que enfrentar a unKirchnerismo que intentara retomar la iniciativa constituyéndose en oposición al gobierno y un Pro que vendrá valentonado, con caja y viento a favor después de la derrota que le propinara María Eugenia Vidal a Aníbal Fernández en la provincia de Buenos Aires, Massa tendrá que contener y rearmar las herramientas que le permitan entrar a la pelea por la senaduría primero y la presidencia después, a sabiendas que una derrota en 2017 lo dejaría prácticamente sin chances en 2019.
