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Débora Georgi: “No veo a Vidal preocupada por tener una política de producción”

Entrevista a la ex ministra de Producción de la Nación y actual secretaria de La Matanza, un distrito clave de la política nacional. Derrumbe productivo, autocrítica y una caracterización del gobierno bonaerense: “Vidal es Macri”.

La Matanza es hoy, por peso propio, uno de los principales polos de referencia que tiene el peronismo a nivel nacional e históricamente el más importante en el conurbano. Desde 2015, también funciona como una red de contención de figuras nacionales y provinciales que quedaron huérfanas luego de la derrota electoral y actualmente ocupan secretarias en el organigrama municipal.

Una de las figuras del “gabinete estrella”, como lo llaman los militantes matanceros, es la ex Ministra de Industria de la Nación, Débora Giorgi, realiza un profundo análisis de la situación económica, productiva y política que atraviesa el país en medio de los anuncios de la vuelta del Fondo Monetario Internacional y la carencia de representatividad que tiene el macrismo en una parte del empresariado.

¿Cuál es la lógica de la economía argentina hoy? ¿Cuál es el sentido?

Sinceramente no le encuentro el sentido al conjunto de medidas que se han puesto en marcha. Si el objetivo fue potenciar una crisis para que el FMI se transformara en aquel ministro fuerte, me parece poco comprensible viendo lo que ha sido la experiencia de la Argentina con el Fondo Monetario, y no sólo de Argentina sino de todos los países. Esta decisión fue totalmente innecesaria, no es que el FMI era la única alternativa. Si tendría que haber manejado esta situación desde octubre, donde realmente Cambiemos tuvo un triunfo enorme, de forma articulada y no con compartimentos estancos, que no solamente son estancos sino que cada área del gobierno está orientada a obtener el mayor aumento de tarifas, buscar la mayor esterilización de pesos y tener el mayor gasto en obra pública. ¿Cómo no se articuló una administración de comercio orientada a la preservación del trabajo, a la agregación de valor? Nosotros hoy dejamos que productos que son desde agroquímicos hasta medicamentos, pasando por alimentos e insumos difundidos, ingresen con un cumplimiento de normas técnicas muchísimo menor que las que nos exigen no sólo China y Estados Unidos, sino la Unión Europea, que se supone que estamos en vías de concretar un acuerdo regional. El mundo no es el que ellos imaginan y, en ese contexto, no “pusieron linda” a la novia o al novio sino que lo pusieron feo: quitaron la fuerza del mercado interno y creyeron que las importaciones bajan precios, pero no es así porque los productos importados siempre vale 2 o 3 puntos menos del producto nacional. Tenés una tasa de interés en donde es más fácil especular y tener una renta por eso. Está todo negativo para la inversión como el alargamiento de plazos de pago. Hay especulación financiera y también especulación productiva, porque también es mucho más fácil exportar. Esto es una mala lectura del mundo.

¿Cuáles fueron los sectores que se vieron más afectados en este contexto?

Esta lectura del plano internacional es consistente con sectores ganadores y perdedores. Los ganadores son, generalmente, sectores que tienen poca mano de obra intensiva: recursos naturales no renovables, desde la energía hasta la tierra, todas las prestadoras de servicios y los bancos. Estos sectores generan dólares, pero ahora los pueden dejar afuera cuanto quieran, son poco intensivos en mano de obra y, más o menos, son entre 13 y 14 puntos del Producto Bruto en cuanto a su aporte a la riqueza. Y del otro lado están todos los demás. Esta cuestión de sectores ganadores y perdedores te llevan a falta de trabajo y un deterioro del salario real por el fracaso de las políticas inflacionarias y por ponerle un techo a la paritaria. Entonces, aparece una industria que se desintegra y que es más competitiva si en su cadena inserta partes importadas, con lo cual automáticamente la transforman en una “maquila” que solo cierra con menos costo de la mano de obra y que se hace menos competitiva. En sectores como el automotriz, el sector de motos y la electrónica les dijeron que debían ser más competitivos y aumentar el ensamblado, que es consistentes con salario muy bajos.

Es un poco como pasa en China, salvando distancias, que se ha convertido en un lugar de ensamblaje de piezas que se traen de otras economías.

Justamente, y también está el golpe tarifario que sufrieron las pymes. Estaba viendo números del Observatorio Pyme y en el 2015 la suma del costo de flete más las tarifas de servicios públicos era del 7%. Ahora, sin la última suba del 2018 estamos en 14% de ponderación. Estos gastos hacen que la gente postergue la reparación de una máquina, un service y un montón de cuestiones que afectan negativamente a la competitividad. ¿Qué crédito tengo yo para una transformación productiva en serio? El Crédito del Bicentenario estaba preparado para mostrar que podíamos tener un Banco de Desarrollo en serio. Si propones como desafío una transformación tan brusca, ¿la vas a financiar con 50% de tasa?

De la experiencia en gestión y el trato con empresarios o sectores productivos, ¿el gobierno representa al empresariado? ¿este es el perfil de empresariado que tenemos, quienes vienen del mundo privado y hoy gobiernan?

Creo que es distinto cuando hablas de un empresario industrial, de una multinacional de servicios, y de un CEO, con todo el respeto porque hay CEO’s brillantes y hay casos en el que uno sigue aprendiendo. Ahora, claramente en este gobierno hay un sesgo de funcionarios que vienen del sector financiero o de los fondos de inversión. Yo diría que es un perfil más perfil financiero y de ejecutivos que vienen de empresas privatizadas o de petroleras. Representan una parte del empresariado, pero hay otra gran parte que no están representados, lo cual no quiere decir que no puedan acceder a tener dialogo, y en estas últimas semanas se vio que muchos no están de acuerdo. Nosotros tenemos un observatorio en La Matanza donde visitamos 110 empresas, hicimos una encuesta, y supimos que 1 de cada 3 empresas despidió, hubo 27% de caída de la producción física y hay caídas de la rentabilidad muy importantes.

Justamente a La Matanza se la conoce como “la capital nacional del calzado” y ahora hay empresas que quedaron funcionando al 10% de su capacidad.

Sí, están trabajando al 10% de su capacidad instalada. Visitamos una empresa de calzado de casi 40 años en el distrito y pasó de producir mil pares a doscientos, y eso poco que produce lo hace para complementar alguna línea de productos y sostener a sus 22 trabajadores. Había llegado a producir dos mil pares.

¿Cómo se puede recuperar toda esa capacidad productiva?

Lo primero es volver a la esencia de que querés un país donde se priorice la producción y el trabajo. Tenés que recuperar que los indicadores macroeconómicos hagan que la producción sea aquello que atrae para invertir y plantear tasas de interés que sean compatibles con un mundo que quiera producir. Una tasa del 40% no es sustentable, no permite el crecimiento productivo. Además, administrar el comercio en forma inteligente, que no es no dejar entrar absolutamente nada para que luego las calidades se deterioren y se hagan los vivos con los precios.

Ante esta situación, Durán Barba no puede dar una respuesta. Del tiempo del mensaje y la comunicación que fue tan eficaz electoralmente, ahora es necesario que el gobierno responda.

Cuando ocurren las elecciones del 2017, la verdad, esperábamos que el gobierno traiga una propuesta que no sean “los brotes” o “esperen el otro semestre”. Luego de eso vino una desarticulación aún mayor donde la voracidad con la que cada uno quería obtener su objetivo generó un desbarajuste enorme. El FMI no era la única alternativa, ninguno de los ratios estaba como en el 2001, hubo una impericia del manejo de la crisis y parece que siempre vamos atrás de la pelota.

¿Y cómo ve la aparición pública de una figura como Domingo Cavallo?

No hay que ser un experto, un erudito o tener siete focus group para mostrar que la gente está angustiada, al igual que el empresario que cree que pierde todo y el ahorrista que tenía su depósito en dólares y quizás lo ha querido sacar. La cuestión es que la gente hacía colas para sacar los dólares de los bancos, de la misma forma que hacía cola en las financieras para comprarlo.

¿Cómo ve a toda esa gente que está por fuera del sistema financiero y se encuentra en el sector informal o trabajando en negro?

Muy mal, porque la changa se redujo muchísimo. Les parece bien que una señora de 85 años tenga que salir de nuevo a trabajar y eso es motivo de un spot. El hecho de que falte la changa del papá de la familia hace que vaya la abuela a ver si puede cuidar al hijo de una vecina, por ejemplo. Es decir, toda la familia tiene que poner el hombro para conseguir esos pesitos que permitan parar la olla. Esto no fue gradualismo, esto fue ajuste. Llegamos acá por un ajuste a la clase media y media-baja, en pos de tener ricos más ricos y pobres más pobres. Se generan 400.000 puestos de trabajo en el sector informal y la industria sigue perdiendo.

¿Y qué opina de la figura del emprendedor que se quiere instalar ahora?

A nivel internacional hay una tendencia hacia el emprendurismo pero no me parece en este momento que es la alternativa que queda. En la industria del calzado, cuando una fábrica cierra y no tienen plata para las indemnizaciones les regalan una máquina a sus 4 o 5 empleados. Entonces, cada uno empieza a hacer lo que puede desde su casa. También la mueblería sufrió muchísimo y ahora está lleno de avisos en las veterinarias de casitas para perros y almohadones para gatos, porque está la necesidad de estar en ese tipo de actividad que se mezcla con un emprendedurismo forzado y que necesita de un estado presente.

Muchos dicen que el gobierno tiene poca sensibilidad ¿en que se traduce eso? En las variables económicas, por experiencia y por gestión, ¿qué significa tener sensibilidad para un economista?

Yo pertenezco a un espacio nacional y popular, ahí esta englobado eso. Nosotros priorizamos al pueblo, a su bienestar, a la igualdad de oportunidades, a la seguridad social, al ser humano en sí para que cada día pueda estar un poco mejor y a partir de eso pensamos el resto de las políticas. Ahora, yo se que el mercado no va a ayudar a todos por igual porque no todos tienen la misma espalda para poder resistir los avatares de éste. Entonces, las imperfecciones del mercado son aquellas que tenés que corregir con las políticas. Eso se traduce con tener la inversión social adecuada, tener un sistema de salud que todavía hoy es utilizado de ejemplo en el mundo. En Chile, que es un país que este gobierno lo pone siempre como referencia, la universidad es arancelada. La sensibilidad tiene que ver con poner como eje de las acciones y de la política al ser humano.

En este esquema, ¿la Gobernadora es distinta al plan nacional respecto a lo económico? ¿Tiene alguna característica distinta en materia económica que Nación?

No, Vidal es Macri. Vidal a nivel productivo de esta provincia, que genera más del 50% del Valor Agregado Industrial del país y el 36% del Valor Agregado Agropecuario del país, delega absolutamente todas las decisiones de política en la Nación. No hay promoción a los parques industriales, no hay áreas de cooperativas intensas, no hay un área en la que vos puedas plantear que con los fondos del CFI tenemos misiones comerciales bonaerenses llevando a los distintos municipios propuestas. Vidal, desde el punto de vista de lo que es la producción y el trabajo bonaerense, teniendo esta provincia industrial por excelencia, delega todo al Ministerio de Producción o a Agroindustria. No tiene política de producción para la Provincia de Buenos Aires y no la veo muy interesada. Delega todo.

El gobierno nacional le ha sacado mucho jugo a la figura de “la pesada herencia”, ¿hubo críticas que considere correctas? ¿Qué cosas cree que podrían haber corregido?

Primero, la herencia no era tan pesada porque sino no hubieran podido endeudarse en 141.000 millones de dólares, independientemente que ahora estemos padeciendo esa equivocadísima decisión. Ahora, creo que sí se pudieron hacer cosas mejores, sería necia si no lo dijera. En mi área, el programa de desarrollo de proveedores a partir del poder de tracción de compra del Estado en inversión de infraestructura, en ferrocarriles, en represas y demás debería haber sido más contundente, y eso tenía que ver con una restricción externa que nosotros teníamos. A ningún país lo industrializás haciendo autos y motos, que esta bueno que los hagan, pero necesitamos industria pesada.

¿Como ve a la oposición frente al contexto actual?

La oposición se está parando. Tiene que plantearse con prudencia y con propuestas porque hay una hipoteca de varias generaciones, no solamente en el tema de la deuda sino en la producción y en los tratados internacionales. Estas son las cuestiones estructurales en las cuales nos plantamos y hacemos oír nuestras voces porque hay sectores muy dañados. El objetivo es lograr la tan ansiada unidad en el marco de un proyecto en común, por eso los secretarios de producción creamos un espacio en común que se llama “Produce Buenos Aires” y congregamos a 32 municipios, que somos más del 35% de la riqueza de la provincia, con una agenda industria, para el campo, para el periurbano y para el pequeño productor agropecuario.

¿A La Matanza que rol le cabe en todo esto? Por distintas razones se la ha puesto como un lugar de referencia.

Porque La Matanza tiene una diversidad productiva, que la hace un polo alimenticio, por ejemplo. Tenemos la única productora de utilitarios, que es Mercedes Benz, un enclave para la producción de alimentos de todo tipo, una cadena metalmecánica, produce el 80% de los herrajes del país, la única empresa que produce gases de uso neonatológico, pero fundamentalmente tenemos a los matanceros. Aun en momentos que sufre mucho, Matanza cuando revertís esta situación es consumo y es la base del sustento a la perfumería, al kiosko y a todos.

Por  – Revista Zoom