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Alex y Charlotte Caniggia fueron condenados en un juicio por amenazas

La Justicia de Córdoba falló en contra de los hermanos por un incidente que protagonizaron a la salida de un boliche en 2017.

Tras ser acusados de lesiones leves, coacción, daños y amenazas, la Cámara Séptima en lo criminal de Córdoba condenó a los hermanos Caniggia. Ambos deberán cumplir trabajo comunitario y se les asignó varios meses de  prisión en suspenso, de acuerdo al fallo que se dio este jueves. Ambos estuvieron involucrados en un escándalo ocurrido en 2017 en una discoteca cordobesa.

Por un lado, Alex Caniggia fue condenado a seis meses de prisión en suspenso, costas y 80 horas de trabajo comunitario (por los delitos de amenazas). Mientras que Charlotte Caniggia, recibió la condena de un mes de prisión en suspenso, costas y 60 horas de trabajo, tras ser acusada de daños. Mientras que su ex manager Fabián Esperón logró ser absuelto ya que no se pudo comprobar la acusación contra él.

Tras conocerse el fallo, Alex utilizó sus redes sociales para darle un mensaje a sus seguidores, junto con su abogado Alejandro Cipolla. “Ale, una consulta. No entendí. Te absolvieron, ¿sería ganamos?”, le consultó al mediático, a lo que éste respondió con un tono muy soberbio.

Fuente: Twitter

“Ganamos, olvidate. Soy un ninja coreano. Mintieron fuerte”, dijo Alex y su abogado le volvió a preguntar: “¿Qué amenazas?¿Será que te condenaron por cholulo?. Justicia berreta me parece la de Córdoba…bueno, lo importante es que se ganó gente”, agregó Cipolla, durante unas stories. “Supuestamente las amenazas era que iba a contratar abogados para ir contra personas que lo agredieron”, insistió. Minutos antes de conocerse el veredicto, el hijo de Mariana Nannis y Claudio Paul Caniggia, había realizado varios gestos obsenos.

Inicialmente, la fiscal Mercedes Balestrini había solicitado cinco meses de cárcel condicional para Charlotte, un año y cuatro meses para Alex y 2 años y, 4 meses de prisión en suspenso para Esperón. Durante los hechos ocurridos en 2017, los mediáticos habían mantenido una discusión verbal en la puerta de un boliche y el periodista Pablo Layús que quiso registrar la escena, fue agredido y le rompieron su teléfono celular.